"Nunca en mi vida estuve tan sola": el crudo testimonio de Ofelia, tía del periodista Hernán Feler secuestrada por Hamás

Ofelia Feler junto a su sobrino Hernán. Foto: EFE.

Ofelia Feler de Roitman, la tía del periodista Hernán Feler, quien fue rehén de Hamás durante 53 días, confesó en una entrevista que "no se volvió loca" gracias a un calendario, en el cual escribía cómo se sentía, además de cartas a su marido, hijos y nietos.

"Es muy hondo, muy fuerte todo lo que viví. Nunca en mi vida estuve tan sola", declaró Ofelia durante una entrevista con la agencia 'EFE' en Jerusalén, acompañada de su sobrino Hernán Feler, el reconocido relator y comentarista deportivo de 'TyC Sports'.

El crudo testimonio de Ofelia Feler, rehén de Hamás. Créditos: EFE.

Ofelia, de 77 años, lamenta que sus captores no le dejaron llevarse consigo ese viejo almanaque donde volcó durante semanas sus sentimientos y pensamientos. "Lo tiraron al suelo y le prendieron fuego", detalló sobre el paradero de dichas cartas.

Antes de su liberación, Ofelia pasó 46 días secuestrada a solas, oscuras y casi sin comida por el grupo paramilitar palestino.

En el enclave, un médico le colocó un vendaje nada más llegar, pero necesitó dos cirugías desde que salió el pasado 28 de noviembre, y la semana que viene se someterá a una tercera para terminar de cerrar la herida.

Ofelia Feler fue rehén de Hamás durante 53 días. Foto: EFE.

Sin embargo, la herida que más tardará en cicatrizar es la mental y la semana que viene también va a comenzar terapia, aunque Ofelia afronta ese episodio de su vida con una fortaleza y entereza que sorprende a propios y extraños.

"El verme fuerte es muy lindo y soy muy optimista, pero empiezo la semana que viene un tratamiento porque necesito sacar todo de dentro. Hay cosas que saco con mi familia, pero es mucho lo que llevo adentro", reconoció mientras se llevó la mano al corazón.

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Confesiones de su secuestro

La tía del periodista argentino pasó su cautiverio sola, en la casa de un matrimonio gazatí, en una zona urbana y bulliciosa, cerca de un mercado, donde "celebraban cuando los proyectiles alcanzaban Tel Aviv o Beersheva", aunque sin saber exactamente dónde.

"Me dejaban sola todo el día, encerrada bajo llave y casi sin luz. Hablaba muy poco con ellos porque casi ni hablaban inglés. De ella supe que se llamaba Aileen, de él casi nada, solo que le decían el 'técnico' y que tenía una pistola, pero no armas largas", develó Ofelia.

Liberación de rehenes de Hamás. Foto: Reuters.

Un día que sintió temblar el suelo preguntó si había sido un terremoto. Le explicaron que no, que debajo de la casa se instalaba una lanzadera de cohetes, que se había estropeado, y que el 'técnico' la estaba tratando de arreglar.

"Yo solo podía pensar en que si fracasaba, el cohete me caería a mi. Tuve una semana de llanto continuo con mucho miedo", recordó Feler.

Y con ese miedo pasó las dos primeras semanas, "en una situación no de loca, pero más o menos", hasta que encontró un calendario donde volcó sus pensamientos y decidió aprovechar las largas horas sola en casa para caminar por el salón.

La liberación de Ofelia Feler. Foto: Reuters.

Además de miedo, también pasó hambre: "Me daban en la mañana un trocito de pan pita, con zataar, muy duro y viejo. Yo lo metía en el vaso de té para poder tragarlo. Por la noche me daban un plato de arroz seco".

"Reencontrarse con ellos fue como tocar el cielo", rememoró sobre su liberación, el quinto día de la tregua de una semana a finales de noviembre entre Israel y Hamás, que permitió el canje de 105 rehenes por 240 presos palestinos.

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Liberación y fundación

Seis días antes de su liberación, la trasladaron a un hospital y allí se reencontró por primera vez con otros secuestrados hasta que ese 28 de noviembre, sin saber a dónde iba, la vistieron "como las árabes", la metieron con otras siete mujeres en una furgoneta y salió para siempre del enclave.

"Todos los días pido por la liberación de todos los rehenes", comentó sobre los 129 cautivos que quedan dentro, aunque se estima que una veintena están muertos.

"Estamos aliviados después de tanto dolor, incertidumbre y tristeza que vivimos durante 52 días, pero hay que seguir luchando hasta que vuelvan todos", señaló Hernán Feler, quien creó la fundación 'Juntos por Israel' para ayudar a las víctimas de Hamás.